Fernando Paz pronunció el Pregón de Navidad 2011
San Juan de Aznalfarache
El pregonero de la Navidad de 2011, Fernando Paz Márquez, quiso comenzar con una alabanza a San Juan de Aznalfarache, su pueblo, a su Navidad y a su esencia misma y lo hizo confesándose sanjuanero por los cuatro costados, para después definir también su profunda religiosidad, dejando claro cual iba a ser el camino por el que se iba a desarrollar su pregón. Así, fue desgranando poco a poco, con cercanía y con evidentes pinceladas de humor, su visión de la Navidad, su vivencia de la Navidad desde su infancia.
Comenzó Fernando dejando patente su pasión por el belenismo y como todo el pregón sembró sus palabras de referencias cofrades "un buen prioste no podría serlo sin ser buen belenista", afirmó. Aquí se dejó llevar por el intimismo y relató con gracia e ironía el papel que cada uno de los miembros de su familia juegan en la instalación del Belén. Después se dejó llevar por los recuerdos de las celebraciones de la Nochebuena y pasó por encima de la Nochevieja hasta detenerse en la noche mágica del 5 al 6 de enero. Aquí, además, de recordar el nervisionismo de la espera en la infancia "y todavía en estos años" echó la vista hacia atrás para dejar algunas pinceladas de su experiencia encarnando al rey Gaspar en la cabalgata sanjuanera. La petición de un niño al subirse a la barcaza en Gelves, "no pedía juguetes, sólo quería un abrazo", o la ilusión por la llegada de Sus Majestadas a Regina Mundi.
El pregón, ajustado en tiempo, estuvo salpicado por los villancicos interpretados por el Coro de los Reyes. Más de 200 personas llenaron a rebosar el Salón de la Casa de las Artes para escuchar este pregón navideño. Tal fue la afluencia que las sillas fueron insuficientes. El pregón de Navidad cuaja como una tradición cada año más seguida por los sanjuaneros y sanjuaneras.
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